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¿Pequeñas cantidades de alcohol son malas para el corazón?
Escrito por
Denis Lopes
Publicado em
10/3/2022
Recientemente, la World Heart Federation (WHF, por sus siglas en inglés) declaró que: "Los datos no respaldan la idea generalizada de que consumir cantidades pequeñas o moderadas de alcohol es bueno para la salud cardiovascular". Pero, ¿qué hay de esa historia de que el consumo moderado de alcohol (15,0 a 20,0 g/día para las mujeres y 30,0 a 40,0 g/día para los hombres) protege el corazón? ¿Que el consumo moderado de etanol (1 bebida diaria para mujeres y 2 bebidas diarias para hombres) reduce las enfermedades cardiovasculares, aumenta el colesterol HDL y disminuye la disfunción endotelial? ¿Todo era una mentira?
Una cosa es segura, los innumerables estudios que han demostrado estos beneficios cardiovasculares son observacionales, no aleatorios, retrospectivos, etc. por lo tanto, tienen numerosas limitaciones metodológicas. Esto es tan cierto que nunca permitieron que los médicos prescribieran una ingesta moderada de alcohol para reducir el riesgo cardiovascular. Pero en cierto modo autorizó el mantenimiento del consumo moderado para quienes ya bebían, sin otras restricciones médicas.
Así, el lector más desatento debe imaginar que esta afirmación de la WHF se basa en estudios prospectivos, aleatorizados, con grupo control, etc. Es decir, estudios definitivos sobre el tema, obviamente no. Gran parte de la evidencia presentada por la WHF proviene de un estudio publicado en The Lancet , Lancet 2018; 392: 1015–35 , y que a pesar de traer información relevante, tiene numerosas limitaciones.
Pero, ¿qué demostró este estudio?
Los investigadores descubrieron que podían mejorar las estimaciones del consumo de alcohol y las muertes y discapacidades atribuibles al alcohol, ajustadas por años de vida en 195 lugares desde 1990 hasta 2016, para ambos sexos, entre personas de 15 a 95 años. Utilizaron 694 fuentes de datos sobre el consumo de alcohol individual y poblacional, junto con 592 estudios retrospectivos y prospectivos sobre el riesgo del consumo de alcohol. Produjeron estimaciones de la prevalencia del consumo actual de alcohol, la abstinencia, la distribución del consumo de alcohol entre los bebedores actuales y su impacto en la muerte y la discapacidad. Hicieron mejoras metodológicas en comparación con estimaciones anteriores: primero, ajustando las estimaciones de ventas de alcohol teniendo en cuenta el consumo turístico y no registrado (clandestino); en segundo lugar, realizó un nuevo metanálisis que estimó el riesgo relativo de 23 resultados de salud asociados con el consumo de alcohol; y finalmente, desarrollaron un nuevo método para cuantificar el nivel de consumo de alcohol que minimiza el riesgo general para la salud individual.
¿Cuáles son las principales conclusiones de este estudio?
Considerando el mundo entero, el consumo de alcohol fue el séptimo factor de riesgo de muerte y discapacidad en 2016, representando el 2,2% de las muertes en mujeres y el 6,8% en hombres. Entre la población de 15 a 49 años, el consumo de alcohol fue el principal factor de riesgo, con 3,8% de las muertes en mujeres y 12,2% en hombres.
Para la población de 15 a 49 años, las 3 principales causas de muerte atribuibles al alcohol fueron la tuberculosis, los accidentes de tránsito y las autolesiones. En la población de 50 años y más, fueron los cánceres.
El nivel de alcohol que minimizó su daño a la salud fue cero bebidas alcoholicas por semana.
Reflexiones de Cardiopapers:
Tenga en cuenta que saber exactamente el consumo diario de alcohol de una persona es muy difícil. Los estudios observacionales, por muy bien hechos que sean, no pueden disponer de estos datos de forma totalmente confiable. A pesar de todos los esfuerzos de los investigadores por refinar sus metodologías y proponer numerosos ajustes, el sesgo de esta información con estos diseños de estudio permanece.
Entendemos que el consumo ligero a moderado y responsable de alcohol no tiene nada que ver con un consumo que hace que el individuo abandone u olvide tomar su medicación antituberculosa, o se exponga a enfermedades de transmisión sexual al no utilizar preservativo por su alto grado de embriaguez. O manejar um vehiculo bajo los efectos del alcohol, o automutilarse por exacerbación de enfermedades psiquiátricas, etc. Contraindicamos fuertemente el consumo de alcohol para menores. El consumo ligero y responsable de alcohol debe ser discutido con su médico y ajustado a su historial médico.
Por lo tanto, concluimos que aún no tenemos una respuesta definitiva a este tema. El consumo ligero o moderado de alcohol debe individualizarse sopesando los riesgos y los beneficios.
NO se recomienda la introducción de alcohol, ni siquiera en pequeñas cantidades, con el objetivo de promover la protección cardiovascular en pacientes que actualmente se abstengan de la sustancia.
Bibliografía: