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¿Cómo puede el médico dar consejos de nutrición en el consultorio?
Escrito por
Denis Lopes
Publicado em
10/3/2022
Recientemente, la AHA publicó una posición sobre un estilo de vida saludable . Enumeró 5 pilares de un estilo de vida saludable (ver la figura a continuación). Uno de los pilares más relevantes es la nutrición a través de una alimentación saludable. Pero, ¿cómo orientar objetivamente a tu paciente en relación a la alimentación? Recomendaciones genéricas como: evitar las frituras, comer muchas frutas y verduras, entre otras, son poco objetivas y por tanto difíciles de seguir. ¿Hay alguna manera de dar recomendaciones más objetivas? Ciertamente. Eso es lo que vamos a revisar en este post.
Para individualizar las pautas es necesario, inicialmente, conocer los hábitos de alimentación de su paciente. Puede incluir algunas preguntas en la historia para identificar el patrón de alimentación que está siguiendo. Preguntar al paciente, por ejemplo, si consume:
- ¿Aperitivos y comida rápida en lugar de comidas?
- ¿Menos de 2 porciones de fruta al día?
- ¿Menos de 2 porciones de verduras al día?
- ¿Más de 200 g (2 filetes grandes) de carne roja al día?
- ¿Utiliza embutidos y carnes procesadas (jamón, pechuga de pavo, longaniza, chorizo, salami)?
- ¿Harinas y cereales refinados (pan blanco, galletas saladas y bizcochos, pasta)?
- ¿Dulces más de 2 veces al día?
- ¿Comida frita?
- ¿Refrescos o jugos endulzados con azúcar (tipo néctar)?
- ¿Mantequilla o manteca?
Al identificar cuáles son los principales hábitos nocivos presentes, puedes proponer cambios graduales. Es interesante que el paciente participe en esta decisión y opine sobre qué hábitos está dispuesto a cambiar, ya que esto ayudará a la adherencia al tratamiento. Comience con dos o tres metas y vuelva a evaluar en la próxima consulta.
Consejos prácticos de nutrición:
- Snacks y comida rápida => reducir a un máximo de 1 comida/semana. Sustituir preparaciones caseras o comidas balanceadas de restaurantes.
- Frutas => agregue 1 porción más por día. Agregue frutas frescas, secas o congeladas a los refrigerios de rango medio.
- Verduras y hortalizas => añadir 1 ración más al día. Agregue verduras frescas o congeladas al almuerzo o la cena.
- Refrescos, jugos u otras bebidas azucaradas => reducir 1 porción por día. Sustituir por agua o té sin endulzar.
- Legumbres (frijoles), nueces, pollo o pescado => aumentar 1 porción por semana. Sustituye la carne roja por pollo o pescado.
- Postres y otros dulces => reducir 1 ración por semana. Sustituya 1 dulce por 1 porción de fruta.
- Uso de mantequilla y/o grasa animal => reducir el uso en la preparación de alimentos / reducir el consumo de manteca y grasa de carne. Reemplace la mantequilla con aceite de oliva, hierbas y especias.
- Uso de sal en la cocina o en la mesa => reducir la sal utilizada para sazonar. Sustituto de hierbas y especias.
- Bebidas alcohólicas => Hombres ≤ 2 tragos por día / Mujeres ≤ 1 trago por día. Reemplace con bebidas no calóricas: agua con gas, jugo de limón.
Estos pequeños cambios graduales son suficientes para aportar más calidad a la dieta del paciente. A medida que incorpore los nuevos hábitos y entienda que es posible mejorar, podrá proponerse otros objetivos en las siguientes consultas. Es una estrategia individualizada y viable para fomentar el cambio de estilo de vida.
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